1- Un tributo que permita la simplificación del sistema
El proyecto de reforma tributaria que impulsa el Gobierno nacional intentará simplificar el sistema impositivo argentino, reducir la presión fiscal y eliminar tributos distorsivos. Entre los cambios más relevantes se destacan la baja del Impuesto a las Ganancias y la creación de un “IVA dividido” o “Súper IVA” que reemplazaría gradualmente el Impuesto sobre los Ingresos Brutos. Hace algunos días, el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, anticipó que la idea oficial es “dividir el IVA entre Nación y provincias”, generando un esquema de competencia impositiva. La meta sería que cada provincia perciba una parte del IVA, reduciendo así su dependencia del Impuesto sobre los Ingresos Brutos, considerado por el Gobierno y los economistas como uno de los tributos más distorsivos del sistema actual. La medida busca unificar bases imponibles, simplificar la administración tributaria y fomentar la inversión y el empleo mediante la reducción de la carga impositiva sobre la producción y el consumo.
2- ¿Cuáles son las dificultades que plantea esta iniciativa?
Dentro de las dificultades para su implementación aparece el heterogéneo nivel de desarrollo entre provincias. En principio, habría al menos ocho jurisdicciones (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Buenos Aires, Chubut, Córdoba, Mendoza, Neuquén, Santa Cruz y Santa Fe) que por la magnitud de su actividad económica podrían autofinanciarse usando como principal fuente de financiamiento el “Súper IVA”. Pero para las 16 provincias restantes podría haber dificultades debido a que -debido a su menor nivel de desarrollo- deberían aplicar un “Súper IVA” con alícuotas muy altas. Casos extremos se dan en algunas provincias del norte donde se requerirían alícuotas estrafalarias debido a su reducida base de recaudación, indica el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa).
3- ¿Cómo incidiría la disparidad de las economías por provincias?
Según Idesa, son muchas las provincias donde la instrumentación del “Súper IVA” podría generar dificultades por su poca generación de valor agregado, desde el punto de vista de la producción, la población y la pobreza sus dimensiones son acotadas. Por lo tanto, es viable adoptar como regla general un esquema de correspondencia fiscal. Esto es, que cada provincia tienda a financiarse con los impuestos que les cobran a sus habitantes tomando como principal fuente de ingresos el “Súper IVA”. Para las provincias donde la debilidad de su economía les genere una recaudación insuficiente, es factible un Fondo de Nivelación que les garantice los mismos ingresos que tienen hoy.
4- ¿Qué pasaría con Ingresos Brutos?
De acuerdo con las declaraciones del propio ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, cada uno de los gobernadores es consciente de que, para avanzar en la simplificación de la carga tributaria, deben disminuir, progresivamente, el Impuesto sobre los Ingresos Brutos, uno de los principales gravámenes provinciales pero también uno de los más criticados por su efecto “en cascada”. Con el nuevo esquema, las provincias recibirían su parte del IVA de forma automática, garantizando recursos sin necesidad de aplicar Ingresos Brutos sobre cada etapa de la cadena productiva. Esa meta parece de difícil cumplimiento, ya que Ingresos Brutos representa entre un 70% un 80% del total de las recaudaciones provinciales.
Caputo promete hacer la reforma tributaria y niega una devaluación5- ¿Se revisarán los regímenes especiales?
Desde el Ministerio de Economía confirmaron que la reforma tributaria incluirá además una revisión integral de los regímenes especiales y promocionales vigentes. La subsecretaria de Ingresos Públicos, Claudia Balestrini, sostuvo que cada beneficio fiscal “debe estar asociado a una política pública concreta y a una necesidad real”, según reproduce el Blog del Contador. La intención oficial es eliminar excepciones innecesarias y consolidar un sistema impositivo más simple, uniforme y transparente, en línea con los compromisos asumidos en el Consejo de Mayo.
6- ¿De qué se trata la baja en el Impuesto a las Ganancias?
El Gobierno prevé bajar el Impuesto a las Ganancias para personas humanas, mediante la suba del Mínimo No Imponible y las deducciones personales, con el fin de aliviar el impacto sobre los asalariados y jubilados. El tributarista César Litvin señaló que “la única baja real en Ganancias es elevar el mínimo y actualizar deducciones como servicio doméstico, alquiler o créditos hipotecarios”. Sin embargo, el Ejecutivo reconoce que esta reducción afectará la recaudación coparticipable, motivo por el cual el nuevo esquema de IVA y la eliminación de Ingresos Brutos son claves para compensar esa pérdida fiscal.
“SuperIVA”: se acelera la reforma tributaria nacional7- ¿Podrá acordarse un nuevo régimen de reparto de la coparticipación federal de impuestos?
Esa es la meta central que plantea el presidente Javier Milei para su negociación con los gobernadores. Ninguno de ellos está dispuesto a ceder parte de su porcentaje histórico, como prescindir de la porción de la torta que le corresponde y que está diseñada en el proyecto de Presupuesto 2026. Algunos mandatarios provinciales consideran que el Gobierno nacional debería ceder parte de su tajada para compensar las asimetrías regionales y, de esa manera, propender a un sistema más armónico. En la Argentina sigue pendiente la reforma de la ley de coparticipación federal de impuestos, lo que no implica que no se hayan instrumentado mecanismos que efectivamente fueran cambiando la distribución de recursos a lo largo de los últimos años. Un cambio legal relevante se originó en la eliminación de la precoparticipación del 15% de la masa coparticipable con destino a la Anses. Esto, sumado al Consenso Fiscal de 2017, posibilitó que la participación primaria de las Provincias y Ciudad Autónoma de Buenos Aires (porcentaje de la recaudación nacional coparticipable que termina en las provincias y CABA) aumentara del 40,5% al 48,6% entre 2015 y 2024, recuerda un reporte del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf). La resolución de un nuevo orden se torna compleja.
8- ¿Cuántos impuestos, tasas y contribuciones coexisten en la Argentina?
El número total de tributos identificados se mantuvo en 155 entre 2024 y 2025, de acuerdo con el vademecum tributario argentino elaborado por el Iaraf. Este año, a nivel nacional, se eliminó el impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS). En el ámbito municipal, se incorporó un nuevo tributo: el derecho por el servicio de transporte de personas concertado a través de plataformas electrónicas. Esta tasa implica que los intermediarios de dichos servicios (aplicaciones) deben abonar el 1% del valor de cada viaje, y que los fondos recaudados se destinan a un Fondo de Movilidad para mejorar el transporte. El 94% de la recaudación consolidada argentina se concentra en diez tributos, ocho de los cuales son nacionales, uno provincial y uno municipal.
9- ¿Cuántos tributos diferentes paga un argentino?
En la actualidad, un argentino promedio puede llegar a pagar entre 21 y 46 impuestos por año, a través de un estudio del Iaraf que identifica las obligaciones que afronta cada contribuyente en base a su perfil. En un primer perfil se incluyen a las personas que por la remuneración de su trabajo consumen alimentos y bebidas, realizan gastos con tarjeta de crédito, adquieren servicios públicos (agua, luz, gas), abonan un servicio de telefonía celular, contratan internet y entretenimiento en plataformas de streaming (Spotify, Netflix, HBO Max, etc.). Pagan un total de 21 impuestos. El segundo perfil agrega casa, auto, paga seguros, el consumo de un recital y el cine, la compra de un electrodoméstico y la compra de dólares para atesoramiento. Abonan 36 impuestos. A un tercer perfil se le agregan un pasaje de avión, la reserva de una habitación de hotel, el consumo en restaurantes, un viaje al extranjero y el cambio de uno de los dos autos por un 0km. Pagan 46 impuestos.